En un estudio muy conocido, monos
recién nacidos fueron separados de sus madres entre 6 y 12 horas después del
parto, y criados en un laboratorio. Los
monos fueron encerrados en jaulas junto con una de dos clases de “madres” sustitutas (una sencilla figura cilíndrica de
malla de alambre o una figura forrada con tela de toalla). Algunos monos fueron alimentados con
biberones conectados a la madre de alambre, otros fueron criados por la madre
cálida y suave de tela de toalla.