Los estudios históricos muestran
que la estructura familiar ha sufrido pocos cambios a causa de la emigración a
las ciudades y de la industrialización.
El núcleo familiar era la unidad más común en la época preindustrial y
aún sigue siendo la unidad básica de organización social en la mayor parte de
las sociedades industrializadas modernas.
Sin embargo, la familia moderna ha variado con respecto a su forma más
tradicional en cuanto a funciones, composiciones, ciclo vital y rol de los padres.